Hoy en día se habla sin parar de la economía circular y del reciclaje en todos los ámbitos pero especialmente en el sector de la construcción.
Actualmente nos encontramos en un escenario en el que se valora mucho la reciclabilidad de los materiales, pero no valoramos en su justa medida su posible reutilización.
Cuando las murallas de las ciudades medievales dejaron de tener uso, en muchas ciudades se aprovecharon para construir viviendas adosadas o incluso se demolieron y se reutilizaron sus materiales.
Hoy en día, los demoledores tenemos en nuestro adn esta visión de la recuperación, primero y obviamente por un puro sentido económico. Pero también, en un papel muy importante ,por la responsabilidad y el orgullo que supone darle una nueva vida a elementos antiguos a los que muchos dan por acabada su vida útil.
La mayor parte de los elementos de una edificación tienen recuperación o, al menos, reciclaje posible. Es responsabilidad de todos los agentes participantes el garantizar el mejor destino para cada uno de los materiales, y por encima de obtener las tan ansiadas hoy en día certificaciones medioambientales, LEED, BREEAM, … habremos puesto de nuestra parte, para una mejor gestión de los recursos.
Es también importante que por parte de los prescriptores se valore la opción del empleo de estos materiales recuperados, que es cierto que al salirse del patrón y homogenenidad de los productos de nueva fabricación, exigen un esfuerzo adicional para su utilización, pero estamos seguros que este esfuerzo merece ampliamente la pena.
Si quieres que nos impliquemos en tu proyecto, aportando nuestro saber hacer, no dudes en contactarnos.